En la costa al sur de Río de Janeiro, una casa con forma de hoja emerge del paisaje brasileño como si de una obra de la naturaleza se tratase. En este proyecto diseñado por el estudio local Mareines y Patalano, la integración con el entorno ha sido la prioridad principal. La casa Folha (hoja) es un gran refugio tropical y como tal la arquitectura tradicional, ayuda a crear un ambiente acorde con su localización y función. Sus seis secciones contienen se encuentran en un gran atrio central, un patio abierto de dos pisos, desde el que que se distribuye el programa interno.
Su interior es tan natural como el aspecto de su exterior. Los suelos y vigas de madera, el color tierra utilizado en sus paredes y un mobiliario con materiales y formas tradicionales refuerzan el papel de la arquitectura local. El uso de estos materiales naturales, la transparencia del vidrio, la neutralidad del cobre oxidado en relación con el verde predominante del paisaje natural proporciona a la vivienda una rica diversidad de texturas, acorde con su diseño orgánico. El sistema de iluminación artificial de la casa Folha es bastante notable, transformando la vivienda durante la noche, periodo del día en el que la vivienda muestra su auténtico carácter.
La casa es eficiente con apenas utilización de tecnología. La playa y las brisas actúan como sistema de refrigeración natural. La altura de las estancias varían entre los tres y los nueve metros, permitiendo que los vientos alisios del SE atraviesen longitudinalmente el edificio, proporcionando una ventilación natural y refrigeración pasiva. El agua de lluvia se recolecta desde el techo para su posterior reutilización.
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