Situada en una pequeña localidad rural cercana a Tokio encontramos esta vivienda diseñado por Terunobu Fujimori y que se caracteriza por una frágil piel de zinc que recubre la fachada al completo. El edificio se inserta en un vecindario caracterizado por viviendas tradicionales lo que le permite destacar de forma clara sobre el resto del caserío urbano. La forma de la vivienda se caracteriza por trazos rectos destacando un volumen con tejado a dos aguas que permanece en suspensión dejando bajo el un espacio para aparcamiento. Un pequeño jardín se sitúa en la parte opuesta proporcionando un pequeño espacio de esparcimiento al aire libre.
La escala de la vivienda es comparable a las de su alrededor con dos diferencias, un uso más eficiente del espacio y su piel de zinc. La estructura está revestida íntegramente de zinc mientras que en el interior las paredes han sido enlucidas con yeso y pintadas en blanco. El tamaño mínimo de las ventanas aseguran la privacidad de sus ocupantes creando un interior cálido e íntimo.
La vivienda diseñada por Finckh Architekten está situada en el lado sur de una colina el la ciudad de Esslingen am Neckar en una nueva zona residencial de esta localidad situada en la región de Stuttgart. Este terreno con excesiva pendiente fue calificado originalmente como no edificable. Con tan sólo 4,70 metros de ancho y 14 metros de largo el estrecho volumen se inserta entre las dos viviendas vecinas situadas también en la ladera llevando al límite las exigencias en materia urbanística. El volumen está compuesto de una muro cortina de paneles de policarbonato opaco de alto rendimiento de 6 centímetros de espesor que se combina con otras áreas de cristal translúcido que la mantienen unida al pequeño patio exterior. El policarbonato ofrece un magnífico rendimiento térmico, algo realmente importante sobre todo en los meses de invierno.
Ya en el interior las divisiones de espacios se realizan a través de muros de hormigón desnudo. Las fachadas laterales de policarbonato aseguran luz y privacidad en el interior, algo a tener en cuenta dada la cercanía de las viviendas adyacentes. En el interior se crea un microcosmos compuesto de luces y sombras, un espacio inesperado en el que todo parece fluir hacia el infinito.
El interior totalmente aséptico se inclina por una combinación de tonos claros y oscuros que encuentran el punto común en el grisáceo hormigón. Se han empleado clásicos del diseño como sillas de Verner Panton o sillones de Le Cobusier lo que le confiere un estilo propio.
El
Museo Júmex es el primer proyecto realizado por
David Chipperfield en América Latina. El museo contará con cerca de 6.600 metros cuadrados que albergará la colección privada más importante de arte en América Latina, reunida el empresario local Eugenio López Alonso. El Museo Jumex presentará una selección de más de 2.750 obras de artistas contemporáneos como Jeff Koons, Olafur Eliasson y Tacita Dean, así como artistas mexicanos, como Abraham Cruzvillegas, Gabriel Orozco, Francis Alÿs y Damián Ortega. El edificio se integra en la Plaza Carso en la que encontramos otras importantes instituciones culturales de la capital mexicana como el Museo Soumaya, diseñado por Fernando Romero, o un teatro subterráneo diseñado por el Ensamble Studio de Madrid.
David Chipperfield ha colaborado con el estudio local TAAU, dirigido por el arquitecto Óscar Rodríguez, en el diseño del edificio, que cuenta con un techo de dientes de sierra que proporciona amplia luz natural a las salas de la planta superior. Desde el exterior se transmite un volumen masiva y sin aberturas, a excepción de algunas aperturas ortogonales en las paredes exteriores. Así, el museo no proporciona señal alguna de sus contenidos hacia el exterior. Prácticamente asfixiado por su entorno, el Museo Jumex sorprendentemente logra destacar como una pequeña fortaleza neomoderna, vestido de mármol de origen local, evocando algunas formas de la arquitectura precolombina.
El Museo Jumex se apoya sobre columnas cilíndricas que pueden verse en la planta baja, generando un soportal que da la bienvenida al visitante. Sus formas se contraponen al futurista museo Soumaya. Su planta en forma de cuña acentúa la verticalidad del complejo. El tratamiento de la iluminación natural es uno de los aspectos a destacar del edificio, mientras en las plantas inferiores la luz procede de las aberturas ortogonales que funcionan además como espacios de exposición al aire libre que encontramos en la fachada, la superior es iluminada indirectamente por claraboyas instaladas en los dientes de sierra.
Datos del Proyecto:
Localización: Ciudad de México, México
Arquitectos: David Chiperfield y TAAU
Construcción: 2013
Superficie: 6600 m2
No es usual encontrarse con una vivienda como esta en un vecindario tipo, entre otros aspectos porque esta construida con 31 contenedores marítimos recuperados. La combinación de contenedores que han sido restaurados y otros que permanecen tal cual fueron adquiridos le confiere al edificio un aspecto industrial que lo convierte en un referente para el entorno urbano sobre el que sea asienta. El programa se distribuye en tres niveles con espacios abiertos e interiores de calidad. Así queda patente en el primer piso donde encontramos el espacio para vida compuesto a su vez de áreas más pequeñas que se solapan.
En el interior la mezcla dinámica de materiales combinadas con amplias superficies acristaladas que permiten que la luz inunde el interior creando una gran variedad de ambientes que permaneces conectados con un frondoso bosques y el río que se sitúa en el entorno. La transición entre el interior y el exterior cobró suma importancia en el diseño de esta casa como lo demuestran los numerosos espacios al aire libre que encontramos en cada nivel. Estos espacios al aire libre han sido especialmente diseñados para relajarse y divertirse disfrutando del clima benigno de Queensland, Australia, el lugar donde se localiza esta casa.
Dispone de cuatro habitaciones distribuidas en los dos niveles superiores anticipando posibles aumentos de la familia en un futuro. Tres se sitúan en la primera planta, mientras que el principal ocupa la tercera al completo. El original diseño del exterior se traslada al interior donde pequeños detalles sorprenden día a día a su moradores, desde los grafittis hasta el mosaico del baño de la suite principal. El interior alberga áreas como una sala de lectura, un estudio de arte un gimnasio o una piscina, este lujoso nivel contrasta con la primera impresión que puede causar desde el exterior, siendo una autentica casa de lujo realizada con materiales reciclados.