Carl Tuner Architects ha transformado un antiguo granero de una casa de campo situada en la campiña inglesa en un pequeño estudio para invitados. Se ha mantenido la estructura del edificio sustituyendo parte de esta por grandes superficies acristaladas. Estos ventanales potencian la relación entre interior y exterior, enmarcando el paisaje circundante. Grandes puertas correderas permite abrir la sala de estar a una pequeña terraza exterior. Esta terraza construida con tablillas de madera de color negro, permite disfrutar del sol mientras se admira el paisaje agrario. Las tablillas de madera que forman la estructura se han pintado en negro destacando su silueta sobre el entorno.
El edificio constituye un espacio no sólo para acoger a huéspedes sino para que los propietarios de la finca puedan disfrutar de un espacio para relajarse y divertirse e incluso mantener reuniones con amigos. El interior se organiza de una manera sencilla y abierta permitiendo cierta flexibilidad en su uso. El comedor e incluso la habitación privada pueden utilizarse para reuniones sociales con sólo mover los muebles. Parte del mobiliario, principalmente las estanterías, se integra en las paredes, facilitando así el cambio de usos.
Se ha utilizado en el interior muebles minimalistas como un pequeño sofá-diván donde descansar o una mesa de café de líneas rectas fabricada expresamente para el proyecto. Las paredes, el suelo y el techo han sido creadas con serrín prensado. La textura resultante se asemeja a las balas de paja que antaño ocupaban el granero, confiriéndole al espacio un interesante aspecto rural. La textura también tiene un propósito decorativo, proporcionando a todas las habitaciones el tono de la madera, sin la necesidad de utilizar piezas de arte o muebles de diseño.
Datos del Proyecto:
Arquitectos: Carl Tuner Architects
Finalización: 2011
Presupuesto: 30.000 Libras
Fotografías: Tim Crocker y Jeremy Phillips.
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El edificio constituye un espacio no sólo para acoger a huéspedes sino para que los propietarios de la finca puedan disfrutar de un espacio para relajarse y divertirse e incluso mantener reuniones con amigos. El interior se organiza de una manera sencilla y abierta permitiendo cierta flexibilidad en su uso. El comedor e incluso la habitación privada pueden utilizarse para reuniones sociales con sólo mover los muebles. Parte del mobiliario, principalmente las estanterías, se integra en las paredes, facilitando así el cambio de usos.
Se ha utilizado en el interior muebles minimalistas como un pequeño sofá-diván donde descansar o una mesa de café de líneas rectas fabricada expresamente para el proyecto. Las paredes, el suelo y el techo han sido creadas con serrín prensado. La textura resultante se asemeja a las balas de paja que antaño ocupaban el granero, confiriéndole al espacio un interesante aspecto rural. La textura también tiene un propósito decorativo, proporcionando a todas las habitaciones el tono de la madera, sin la necesidad de utilizar piezas de arte o muebles de diseño.
Datos del Proyecto:
Arquitectos: Carl Tuner Architects
Finalización: 2011
Presupuesto: 30.000 Libras
Fotografías: Tim Crocker y Jeremy Phillips.
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