

El edificio fue pensado para albergar la llama de los juegos Asiáticos celebrados en 2006. Alberga un lujoso hotel con balneario y un restaurante giratorio situado a 215 metros de altura. La fachada envolvente de acero inoxidable es uno de los aspectos más destacados del proyecto. Durante la noche se encuentra iluminada gracias a un sistema de LED con varias pantallas exteriores que resaltan el edificio durante la noche.


El arquitecto describe la estructura de acero: "el resto del edificio es una estructura de acero que cuelga y sale en voladizo del núcleo de hormigón. Creo que el hecho de de colgar el edificio del núcleo también constituye una primicia".

