Messana O’Rorke Architects han concluido la rehabilitación esta residencia en un edificio de los años treinta en el corazón de Greenwich Village en Nueva York. La vivienda cuenta con una terraza privada, por la que se accede a través de un antiguo depósito de agua reconvertido en un "retiro urbano". El diseño sencillo se mantuvo, pero reconfigurándose parte del programa para que las habitaciones tuvieran un acceso individual al baño en lugar de que este fuera desde la sala de estar. La superficie del baño se ha duplicado convirtiéndolo en un pequeño spa, con un suelo de piedra y paredes de yeso resistentes al agua.
En la sala de estar y los dormitorios, los espacios destinados a almacenamiento se han ocultado detrás de armarios creados a partir de paneles lacados. El suelo de madera de arce se ha conservado, sometiéndose a una profunda restauración. La antigua escalera de acero pintado se ha sustituido por una escalera de caracol de acero inoxidable con peldaños de madera, más acorde con el diseño moderno del loft.
El deposito renovado, que ahora funciona como espacio de transición entre el interior y la terraza exterior es el elemento más interesante del proyecto. El equipo de arquitectos ha llevado a cabo una restauración integral del tanque, reforzando su estructura y abriendo un vano de tres metros de altura que ofrece unas magnificas vistas de la ciudad de los rascacielos. En el centro del depósito encontramos una claraboya que proyecta una luz etérea sobre el espacio. No es la única que encontramos en el loft, otra proyecta una luz directa sobre la mesa del comedor.