




Al estar semienterrado, la luz penetra de forma indirecta a través del techo en el primer tramo del museo creando un ambiente místico y reflexivo que contrasta con el ventanal que se sitúa al final del edificio donde la luz penetra de forma directa, creándose una metáfora entre la reflexión y la clarividencia en el arte. Este gran ventanal ha sido denominado por Querkraft como una "ventana-cuadro".



El museo sobresale de la montaña treinta metros, quedando completamente suspendido en el aire. El exterior está recubierto de acero corrugado, dejando al desnudo la estructura de hormigón en el tramo voladizo.


Datos del Proyecto:
Arquitecto: Querkraft
Ingeniero Estructural: Werkstatt Wien
Comienzo: 2007
Finalización: 2009
Superficie Construida: 4400 m2
Fotografías: Lisa Rastl Y Christine Bärnthaler





