Poseer un loft ha sido siempre algo muy bohemio, y de hecho, así surgieron, como espacios industriales en desuso que por su precio asequible eran ocupados por artistas. El concepto de loft se ha renovado y actualizado, desvirtuándose de sus orígenes humildes para convertirse en interiores que por su sofisticación requieren de grandes inversiones para poder ser vividos. En este artículo queremos volver a los orígenes, recorriendo algunos lofts a través del mundo que siguen siendo usados como taller para artistas.
En el distrito parisino de Belleville encontramos este loft inspirado por la estética hipster, lleno de detalles y con un mobiliario seleccionado por Multiarchi en tiendas de España, Francia, Italia y Suecia. El resultado es un interior único y original pensado para reflejar la personalidad de sus propietarios. El proyecto se desarrollo dentro de un viejo almacén situado encima de una panadería. En el loft podemos observar los techos originales de madera, integrándose como un elemento central en la escena interior. El gran volumen abierto, sin divisiones, lleno de luz natural, fue el comienzo de la inspiración.
"Hemos querido jugar con los espacios en el interior, preservando las cualidades que rara vez se encuentran en París" Multiarchi
© Multiarchi |
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La cocina tiende a desaparecer alrededor de un bloque abstracto de hormigón, El espacio reservado al baño crea un altillo sobre él que ofrece un espacio de juego, dando acceso a la habitación reservada para los niños.
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Para resaltar el foco sobre el volumen principal, los arquitectos han ocultado las puertas de las habitaciones imprimiéndole solidez. El mobiliario aporta un toque de color que rompe con la monotonía cromática del interior.
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Este ático diseñado por Ofist se encuentra en el centro de Istambul con vistas sobre algunos de los monumentos de la ciudad otomana como una antigua iglesia armenia o la Torre de Gálata. El apartamento cuenta con 168 metros cuadrados.
La ubicación de la casa, así como la personalidad, el estilo de vida, y las necesidades del cliente, fueron los principales parámetros que condicionaron el diseño de este proyecto. El distrito de Karakoy siempre ha sido el corazón del comercio en Estambul. Hoy en día, el antiguo barrio se está convirtiendo en un lugar de moda en el que se han incorporado nuevas galerías de arte, boutiques, restaurantes y hoteles. La casa está situada justo en el medio de este espacio urbano. A la hora de elegir los materiales y el diseño del espacio se han tenido en cuenta los gustos del cliente. Natural, neutral, cómodo y práctico son las palabras clave que describen el concepto de diseño creado por Ofist para este loft.
El enfoque estructural buscaba abrir la casa al exterior para que entrará mayor cantidad de luz natural y potenciar las vistas. Las pequeñas aberturas de las ventanas anteriores en la fachada frontal se ampliaron y los nuevos marcos de las ventanas corredizas que se desplazaron para transformar la sala de estar en el balcón abierto a la ciudad. Se insertó una gran claraboya rectangular justo debajo.
El enfoque de diseño de la casa, sin embargo, se encaminó a crear un ambiente minimalista, sin demasiados elementos. Los arquitectos evaluaron la casa como un todo, un sólo espacio, ya que iba a ser utilizada por una única persona, entrelazando los espacios intencionalmente. No se tuvo la necesidad de dividir el espacio en muchas habitaciones pequeñas; por ello se decidió mantener un mismo diseño base para toda la vivienda, exceptuando lo baños.
El cemento es uno de los materiales básicos empleado. A lo largo del entresuelo, las superficies fueron cubiertas con un material a base de cemento, sin interrupción, para crear una agradable sensación con los pies descalzos. La ducha y el "bloque macizo", en el que está ubicada la cama y la bañera también están realizados en el mismo material. Por la practicidad y la calidez que aporta se instaló un techo continuo de madera de iroko.