Señalización de emergencia. Al servicio de la seguridad

Si la señalización exterior e interior de un edificio debe dar confianza al usuario del mismo, en el caso de la de emergencia y evacuación, la seguridad es un condicionante fundamental e imprescindible para la seguridad del usuario.


La señalización de emergencia es algo que molesta a todos, especialmente a los arquitectos. Siempre opinan que hay más rótulos y son más grandes de lo que deberían ser y de lo que les gustaría. Son elementos que no ayudan a mejorar la estética del espacio. Tenemos que convivir con ellos porque son obligatorios. Por eso es importante realizar los proyectos de emergencia y evacuación con un detallado y minucioso estudio de necesidades, ejecutándolos con el conocimiento del entorno y la legislación vigente. Pero a la vez es importante que tengan una mínima calidad y estética, sobre todo en aquellos proyectos en los que se ha cuidado la arquitectura y la calidad de la construcción, materiales y acabados. No tiene mucho sentido invertir una gran cantidad de dinero y esfuerzo en contratar al mejor estudio de arquitectura y cuidar la calidad en la construcción al máximo, para después poner la señalización de emergencia y evacuación más barata y menos cuidada. En un buen proyecto de arquitectura hay que cuidar hasta el más mínimo detalle.

Por otra parte, cualquier defecto de fabricación o una mala ubicación de las señales pueden convertirse en un problema futuro. La señalización de emergencia va dirigida a alertar tanto a los usuarios habituales del edificio como a los visitantes, de la aparición de una situación de peligro y de la consiguiente y urgente necesidad de actuar de una forma determinada o de evacuar la zona de peligro.

Esta señalización abarca, tanto la señalización de la localización de los medios de protección contra incendios como la señalización de evacuación, salvamento y socorro en sus diferentes tipos y modalidades: rótulos direccionales que nos indican hacia dónde están las diferentes salidas de emergencia y evacuación del edificio; rótulos posicionales para colocar en las salidas de emergencia; planos de evacuación, en los que se muestran tanto los recorridos hacia las salidas de emergencia, como la ubicación de los diferentes equipos contra incendios (mangueras, pulsadores, extintores, etc.); señales que nos indican la ubicación de los equipos contra incendios, así como otro tipo de mensajes indicadores de la no utilización en caso de incendio de una determinada salida o los ascensores.


En la señalización de emergencia se debe ser infalible. Por ese motivo no tiene que haber espacio para los errores. Todos los edificios se deben señalizar por normativa y por sentido común pero, lamentablemente, las alternativas estándar que proporciona el mercado dejan mucho que desear, tanto por los básicos materiales utilizados, como por sus impersonales grafismos. Al final, señalizar un espacio según normativa se convierte, en demasiadas ocasiones, en un atentado a la estética y el buen gusto.

Y, ya que hablamos de elementos que hay que colocar por ley, es importante que los rótulos de emergencia y evacuación la cumplan al máximo: a ser posible deberían ser de categoría A (productos fotoluminiscentes con alta luminancia, empleados preferentemente para señales y balizamientos de lugares de concentración pública o con iluminación exclusivamente artificial). Y si, además, tienen un diseño bien resuelto y a un precio competitivo, habremos conseguido un reto... y dejaremos contento al arquitecto!

Compartir:

0 comentarios