En las colinas de
Killesberg. Stuttgart, encontramos esta residencia diseñada por
Werner Sobek y que representa a la primera vivienda activa del mundo. En la colonia Weissenhof, donde se asienta, grandes arquitectos revolucionaron el mundo de la arquitectura y los materiales en los años veinte del siglo XX. Parte de estas viviendas fueron destruidas en la Segunda Guerra Mundial y posteriormente reconstruidas. Ahora, un nuevo y progresivo edificio, orientado hacia el futuro ocupa una parcela este barrio. Consturida a lo largo de tres años en ella se han implantado una gran cantidad de innovaciones que van desde los materiales hasta el sistema de gestión de energía.
El proyecto de investigación se ha denominado "B10", abreviación de la dirección Bruckmannweg 10, en la que se sitúa la primera casa activa del mundo. Gracias a un concepto de energía sofisticada y un sistema de control de autoaprendizaje la casa es capaz de generar el doble de energía que consume, y todo a partir de fuentes sostenibles.
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La vivienda diseñada por Finckh Architekten está situada en el lado sur de una colina el la ciudad de Esslingen am Neckar en una nueva zona residencial de esta localidad situada en la región de Stuttgart. Este terreno con excesiva pendiente fue calificado originalmente como no edificable. Con tan sólo 4,70 metros de ancho y 14 metros de largo el estrecho volumen se inserta entre las dos viviendas vecinas situadas también en la ladera llevando al límite las exigencias en materia urbanística. El volumen está compuesto de una muro cortina de paneles de policarbonato opaco de alto rendimiento de 6 centímetros de espesor que se combina con otras áreas de cristal translúcido que la mantienen unida al pequeño patio exterior. El policarbonato ofrece un magnífico rendimiento térmico, algo realmente importante sobre todo en los meses de invierno.
Ya en el interior las divisiones de espacios se realizan a través de muros de hormigón desnudo. Las fachadas laterales de policarbonato aseguran luz y privacidad en el interior, algo a tener en cuenta dada la cercanía de las viviendas adyacentes. En el interior se crea un microcosmos compuesto de luces y sombras, un espacio inesperado en el que todo parece fluir hacia el infinito.
El interior totalmente aséptico se inclina por una combinación de tonos claros y oscuros que encuentran el punto común en el grisáceo hormigón. Se han empleado clásicos del diseño como sillas de Verner Panton o sillones de Le Cobusier lo que le confiere un estilo propio.
Braun & Güth Architekten han llevado a cabo la rehabilitación de un antiguo edificio neoclásico del Siglo XIX en el centro de
Frankfurt. El edificio original recibió severos daños durante la Segunda Guerra Mundial, recibiendo una agresiva renovación tras ésta que modificó completamente su esencia neoclásica. A pesar del estado decadente del edificio, los clientes encontraron restos del edificio original. El proyecto encaminado a rescatar estas cualidades persistentes y latentes, se ha basado en un concepto donde destacamos el diseño cálido y contemporáneo donde la madera toma un especial protagonismo. El objetivo era sintetizar en una entidad lo viejo y lo nuevo logrando alcanzar un armonioso contraste entre ambos.
La
fachada clásica, simétrica a lo largo del eje principal, se divide en tres niveles, planta baja, piso principal y entreplanta. Está compuesta de bloques de piedra de arenisca colocados de forma horizontal que crea sobrios patrones. Otras áreas de la fachada de piedra fueron tallados con un fino y delicado patrón ornamental recuperando de este modo parte de su estética neoclásica.
En contraste con la simetría de la fachada principal que da a la calle, la casa se abre al jardín. Los diferentes elementos de la fachada no están vinculados a un orden estricto, sino más bien forman un collage. Al diseño interior se le ha aplicado una selección reducida y precisa de materiales que combinan con la variedad de la existente y los elementos añadidos dando como resultado una síntesis armónica y funcional.
Datos del Proyecto:Localización: Frankfurt, Alemania
Arquitectos: Braun & Güth Architekten
Superficie Total: 300 m2
Proyecto: 2008
Construcción: 2011
Fotografías: © Peter Wünstel
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El arquitecto alemán Jürgen Mayer ha completado una nueva vivienda en Sttutgart, Alemania. La vivienda está situada sobre una colina desde la que se tiene una vista completa del entorno urbano en el que se inserta. La casa ha sido diseñada para una familia de cuatro miembros dividiéndose en tres niveles. Una planta baja, con recibidor, lavadero y spa, un segundo piso con un programa abierto, que contiene las áreas de estar, comedor y cocina y un tercero que contiene las estancias privadas. Las grandes superficies acristaladas ofrecen una visión directa del valle desde el interior.
El elemento central es una escalera con el sello orgánico propio de Mayer, una pieza escultural que conecta los tras niveles de la vivienda. Otro de los elementos destacados son las terrazas exteriores, la fachada se retranquea, creando una cavidad que proteje los vidrios de la exposición solar. Para la constucción de la vivienda se han empleado planchas de zinc reciclado y cuenta con placas solares para el calentamiento de agua como medida activa de ahorro energético. La Casa OLS es la segunda vivienda unifamiliar que diseña Jürgen Mayer tras la Dupli Casa de 2006.
Datos del Proyecto:Localización: Stuttgart, Alemania
Arquitecto: Jürgen Mayer
Proyecto: 2012
Finalización: 2013
Superficie Habitable: 488 m2
Superficie de la Parcela: 891 m2
Fotografías: © David Franck
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