Proyecto para el Monumento a la Libertad y la Unidad de Leipzig (Alemania) de Josep Lluís Mateo



El estudio de Josep Lluís Mateo (MateoArquitectura) nos ha enviado información sobre su último proyecto, un Monumento a la Libertad y la Unidad en Leipzig, Alemania. El Monumento pretende convertirse en un memorial a la revolución pacífica que convirtió a Leipzig en  uno de los epicentros de la caida del muro de Berlín. El proyecto se encuentra en el mismo eje que el monumento a la batalla de Leipzig, para Mateo esto constituye una potente fuente de inspiración: "Formal y conceptualmente, nos parecía que nuestra intervención en este caso tenía que operar en superficie y no en volumen; debía ser horizontal y no vertical. Frente la montaña del Völkerschlachtdenkmal, nosotros éramos el mar que persistentemente erosiona la dura roca y la transforma en arena.".


El monumento se encuentra a la entrada de la ciudad histórica en un vacio que parcialmente se urbanizará, por lo que el futuro también ha sido tenido en cuenta en el proyecto. El espacio está formado por tres partes bien diferenciadas:

A. El bosque de la memoria

Establece el contacto con las nuevas intervenciones edificadas del sur-este. Suelo de tierra, espacio infantil y familiar. Su diseño es una alegoría de la historia que recordamos: diversas especies vegetales interpretan las diferentes texturas que las manifestaciones de la época expresan. La evolución de las plantas, con sus diferentes momentos de floración marcan la secuencia creciente de densidades de la historia que recordamos.



B. El suelo de las masas

Un gran pavimento de piezas pequeñas de piedra es la base del gran espacio de rencuentro de las masas. El pavimento construye el mundo, recordamos la unidad a escala mayor. El pavimento integra luces, una fuente, otros recuerdos (trazados históricos). Está limitado por dos muros rotos: a la izquierda, próximo a la calle Petersteinweg, construye parte del pabellón de la memoria, bancos, el soporte del gran palo vertical provee de luz en la noche al mundo. Hacia la derecha el muro es simplemente con desnivel, un asiento. El llano ha superado al muro. El espacio esta preparado para ser el soporte de nuevas manifestaciones, una pista de hielo, mercado de Navidad, un concierto de rock; por ejemplo.


C. El pabellón del recuerdo

Sobre la esquina de las calles Petersteinweg y Windmühlenstraße un pequeño accidente construido, recuerda más explícitamente, la historia. Este objeto tiene tres partes:


1.El muro rojo agujereado

Un muro de hormigón construido con virutas metálicas como arena, progresivamente enrojecido en el tiempo. El muro se rompe, ya no separa, une. Las palabras “Wir sind das Volk” generan las ventanas en el muro.

2.El estanque dorado de los deseos

En la base del muro rojo un pequeño estanque lo refleja. Es de oro (ó así parece su fondo). Podría imaginarse que se lancen monedas como en otros lugares para solicitar el cumplimiento de deseos insatisfechos.

3.El cielo negro: el filtro de la luz

Un pequeño techo apoyado en el muro y perpendicular a él filtra la luz solar que se transforma en rayos. Estos iluminan el suelo, gruesas losas de piedra con las palabras de aquel tiempo grabadas. Palabras de aquel tiempo y del nuestro.

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